Adivina cuánto te quiero
por Sam McBratney
Era la hora de dormir
La liebre pequeña color avellana
Se agarraba fuertemente a las orejas
de la gran liebre color avellana
De que la liebre grande la escuchaba.
-adivina cuanto te quiero
Le dijo.
-uf!, no creo que pueda adivinarlo
Contesto la liebre grande.
-así,
Dijo la liebre pequeña abriendo los brazos todo lo que podía.
La gran liebre color de avellana tenía los brazos aun mas largos:
-pues yo te quiero así le respondió umm…, cuanto! Pensó la liebre pequeña. yo te quiero hasta aquí arriba,
Añadió la liebre pequeña.
-y yo te quiero hasta aquí arriba,
Contesto la liebre grande.
-que alto…ojala yo tuviese brazos tan largos!
Pensó la liebre pequeña.
Entonces tuvo una idea:
-te quiero hasta la punta de mis pies,
Dijo.
- y yo te quiero hasta la punta de tus pies,
Dijo la liebre grande color de avellana
alzándola por encima de su cabeza.
-te quiero todo lo alto que pueda saltar,
se reía la liebre pequeña dando brincos arriba y abajo
-pues yo te quiero todo lo alto que pueda saltar,
y dio tal brinco que sus orejas rozaron las ramas de un árbol
-que salto!,
pensó la liebre pequeña.
-como me gustaría saltar así!,
te quiero de aquí hasta el final del camino, hasta el rió a lo lejos!,
grito la pequeña liebre.
-yo te quiero mas allá del rió y de las lejanas colinas,
dijo la liebre grande.
-que lejos!,
pensó la liebre pequeña color avellana.
Tenia tanto sueño que no podía pensar mas.
Entonces miro por encima de los arbustos,
Hacia la enorme oscuridad de la noche.
Nada podía estar mas lejos que el cielo.
-te quiero de aquí a la luna!,
Adivina cuanto te quiero
Dijo, y cerro los ojos.
-eso esta muy lejos,
Dijo la liebre grande.
-eso esta lejísimos.
La liebre color avellana
Acostó a la liebre pequeña
En una cama de hojas.
Se quedo a su lado
Y le dio un beso de buenas noches.
Luego se acerco aun mas y le susurro con una sonrisa:
-yo te quiero de aquí a la luna…y vuelta